1ª a 5ª. No se sitúa en ningún lugar físico. Se trata de la proyección sublimada de una obsesión. Es la obsesión de un arquitecto, el reflejo tautológico de su ideología eugenista : el rascacielos emblemático de una ciudad sin relieve, "hospitalaria" (ver su revestimiento como de gasa, de venda), sin exterior ; la ciudad de una comunidad penitenciaria y enferma. Naturalmente, esa ciudad debe ser eminentemente estetizada… hasta lo insano.

6ª. Dado su origen, no puede ser nada de esto. Afortunadamente, la imaginación impone sus límites para impedir que penetre en ella la fantasía y la credulidad.
Sin embargo, sí desearía que fuera algo : un cúmulo de escombros, un solar. Aquí, sí, la imaginación puede echar abajo los ídolos de la dominación y fundar sobre sus restos un imaginario fecundo y emancipador.

7ª a 9ª. Sobre todas las cosas : esto no es un "castillo de la subversión", sino su total negación. Mucho menos es una actualización de "La clara torre". Aquí no se bebe el licor rojinegro de los sueños audaces. Esta ceremonia no tiene lugar aquí. Con todo, llega hasta mí el rumor de un resquebrajamiento que por ahora es solamente un anhelo. Mas no desespero…